martes, 29 de marzo de 2016

REPOSTERIA CREATIVA




La repostería creativa es, para mi, un tipo de "arte culinario" ya que gracias a unos pocos ingredientes y sobre todo a tu "vena artística", podrás transformar una simple galleta o una simple magdalena en una dulce  creación artística llena de colorido.
Antes de hacer ningún tipo de receta, lo primero será explicar ciertas cosas básicas que tienes que saber antes de ponernos "manos a la obra".
Como te he dicho, vamos a transformar una simple elaboración repostera en una obra de arte, para lo cual utilizaremos un ingrediente indispensable, la pasta de azúcar.
La pasta de azúcar también conocida como fondant es como una plastilina comestible que está hecha principalmente de azúcar.
Esta pasta podrías hacerla tú en casa pero por mi experiencia en el tema te diré que es mucho mejor comprarla ya elaborada, es mucho más cómodo, más práctico, de coste más o menos igual, y además el acabado es mucho más satisfactorio sobre todo en lo que se refiere a color y textura.
Tendrás que tener un poco de paciencia porque antes de enseñarte como decorar tengo que explicarte varias cosas a cerca de los ingredientes y materiales que vamos a utilizar, paso indispensable a la hora de introducirte en el fascinante mundo de la resposteria creativa.
Mi intención al "crear" este dulce rincón en "De La Escuela a la Cazuela", estará enfocado a  enseñar principalmente a los niñ@s para que hagan sus pequeños pinitos reposteros, porque  este tipo de cosas  les
ayuda a ser más imaginativos y creativos.
En la foto que te muestro en el encabezado podrás ver de arriba a abajo de izquierda a derecha: una galleta gigante forrada con fondant y adornada con un maravilloso mundo de Adas, una tarta marina muy especial, un centro de flores que en realidad son galletas decoradas, una magdalena transformada gracias al fondant en un simpático muñeco de nieve, una tarta muy pirata y un rincón del País de Nunca Jamás con Peter Pan y Campanilla.
Son solo pequeñas muestras de lo que se puede hacer con fondant , a si que en breve comenzaremos las clases necesarias para que los niños decoren galletas y magdalenas de una forma fácil, sencilla y entretenida.
¡Será un "dulce juego de niños" que compartiremos pequeños y mayores!


lunes, 7 de marzo de 2016

MAGDALENAS DE CHOCOLATE

Fáciles y rápidas de hacer ...  así son ellas  y si eres un chocolater@ empedernid@  sin duda ¡esta es tú receta!, es más, me voy a "tirar a la piscina" y te digo desde ahora que probablemente nunca has probado unas magdalenas de chocolate tan ricas como estas, de verdad que son un "pecado mortal".
Viendo la foto creo que no hace mucha falta que intente "venderte" la receta ya que ¡una imagen vale más que mil palabras!


INGREDIENTES:
  • 100 ml de aceite de girasol.
  • 2 huevos.
  • 120 grs de azúcar moreno.
  • 115 de nata líquida (35% materia grasa, es la de montar).
  • 1 cucharada de miel.
  • 120 grs de harina blanca ( si tienes de repostería mejor).
  • 35 grs de cacao en polvo sin azúcar.
  • 1 cucharadita de levadura química tipo royal.
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato.
  • 2 cucharadas de café instantáneo.
Con estas cantidades nos salen 12 magdalenas.

ELABORACIÓN:

Lo primero decirte que si no tienes una batidora eléctrica puedes hacer la receta con una varilla manual de las de toda la vida, simplemente que este tipo de máquinas nos hacen la "vida más fácil y cómoda", nada más.
Comenzamos poniendo el azúcar.


Y le añadimos los huevos.


Batimos ambos ingredientes "a conciencia" ya que con este paso conseguiremos una masa mucho más esponjosa porque al batirlo muy bien la masa tendrá mucho aire.


Una vez tengamos la masa así de "aireada" le incorporaremos el aceite.


Y cuando esté mezclado con el azúcar y los huevos le toca el turno a la nata.


En un bol a parte tendremos mezclados el harina, el cacao, la levadura y el bicarbonato, todos ellos tamizados. ¡Ah se me olvidaba! y una pizca de sal, esta hará que el sabor del cacao resalte mucho más.


Por si no te acuerdas, el cacao que tenemos que utilizar es este, no sirve cualquier tipo de cacao para disolver en leche.


Después de echar la nata vamos añadiendo la mezcla de ingredientes secos ( harina, cacao, levadura y bicarbonato y sal).


Mezclamos en una cucharada de agua el café soluble. Si las magdalenas las van a comer los niños, si quieres puedes ponerle café descafeinado. No pasa nada, o  incluso puedes no ponerlo pero la verdad que le aporta "un toque" que a mi me encanta, aunque con la cantidad que ponemos el que no las ha hecho ni siquiera apreciará que lleva café.


Y se lo añadimos a la masa.


Por último agregamos la cucharada de miel. Te diré que la miel en esta receta tiene una "función especial", en realidad no necesitamos más "dulzor" ya que con el azúcar que le hemos puesto sería suficiente, lo que pasa es que cuando utilizamos cacao en polvo en recetas de este tipo, suele "resecar" un poco el resultado final, pues bien, añadiendo la miel, esta hará que las magdalenas queden más jugosas impidiendo esa "sequedad" que le aporta el cacao.


Ponemos la mezcla en las cápsulas. (No te preocupes si no tienes una bandeja como la mía para magdalenas, puedes hacerlas como siempre en la bandeja del horno),  lo bueno de utilizar este otro tipo de bandejas es que hacen que la magdalena quede "recogida" y así evitar que por el peso de la masa se "desparrame".
Llenaremos tres cuartas partes del molde con la masa.


Con el horno precalentado a 180 grados las metemos con calor arriba y abajo durante unos 15 minutos.
Ya sabes que cada horno es un mundo, a si que usa el truco de siempre, pincha una y si no hay restos de masa cruda es que ya las tenemos listas.
Te he hecho una foto de cerca para que veas que jugosas quedan por dentro


Por muchas descripciones que te haga de la receta y por muchas fotos que pueda aportar, realmente hasta que no las hagas no te darás cuenta del "descubrimiento chocolatero" que juntos hemos hecho en "De La Escuela a La Cazuela", ¡espero que las disfrutes en buenas compañías!

miércoles, 2 de marzo de 2016

CROISSANT SALADO

El croissant salado que te voy a enseñar a preparar, es sin duda, uno de los bocados que más gustan cuando preparo un picoteo, ya que en un solo bocado disfrutaremos de una  mezcla perfecta y equilibrada de sabores dulces y salados.
Además se puede preparar con horas de antelación, incluso de un día para otro se conserva perfectamente,  cosa que nos dará mucha tranquilidad y nos "dejará margen" para preparar el resto del menú.



INGREDIENTES:
  • Pequeños croissants de mantequilla.
  • Atún de lata.
  • Mahonesa.
  • Huevo cocido.
  • Lechuga.
  • Espárragos.
  • Queso en lonchas tipo tranchete.
  • Jamón cocido.
Como has visto, no es que se me olvide ponerte las cantidades, ya que irán en función de cuantos tengas que preparar.
Ni que decir tiene que puedes quitar algún ingrediente si no es de tú agrado o añadirle alguno que te guste.

ELABORACIÓN:

Lo primero que quiero enseñarte es cuales son los croissants que yo utilizo para esta receta. No pasa nada porque no sean de esta marca, pero yo siempre compro estos ya que he utilizado otros y la verdad, no se si es porque soy algo "tiquismiquis" pero a mi me parece que si utilizo otros no aportan el mismo sabor, pero vamos, que si no los puedes comprar tampoco pasa nada.



Lo segundo que quiero enseñarte es este "artilugio",( te adelanto que no sirve para realizar ningún tipo de tortura) ya sabes que en "de la Escuela a la Cazuela" no solo pretendo enseñarte a cocinar sino que me gustaría transmitirte en la medida de lo posible mi "cultura culinaria" a todos los niveles, por eso creo que es importante aprender que existen utensilios que pueden facilitarnos las tareas.


 Pues ni más ni menos que sirve para cortar el huevo cocido en láminas del mismo grosor, tarea que con un cuchillo nos resultaría mucho más complicado de hacer.
Colocamos el huevo de esta forma y ponemos encima la parte de los filamentos metálicos presionando con fuerza.


Y conseguiremos cortar el huevo fácilmente.


De esta forma ya tenemos nuestro huevo cortado en perfectas rodajas sin tener que hacer "malabarismos" con el cuchillo.


 Mezclamos la mahonesa junto con el atún. La cantidad de mahonesa la tendrás que decidir tú dependiendo de tus gustos, lo único que puedo aconsejarte es que dejes la mezcla "jugosa".


 Ya tenemos todos los ingredientes preparados y ahora comenzaremos por el "montaje".
Partimos el croissant por mitad.


Dejamos la "tapa" a un lado y vamos colocando todos los ingredientes sobre la otra parte.
Lo primero será poner un trozo de queso. Yo utilizo tranchete a si que corto uno por la mitad para que no sobresalga por los lados.


Colocamos encima el jamón cocido. Yo pongo un trozo del tamaño de un tranchete de queso entero y le doblo por la mitad, ya que menos cantidad no aportaría casi sabor.


Le toca el turno al huevo cocido.


Y luego a los espárragos. Yo como utilizo unos que son bastante finos, antes de colocarlos los aplasto un poco y quedan más planos ( así no saben tan fuertes y se reparte más el sabor).


Colocamos lechuga al gusto.


Untamos "la tapa" con la mezcla de mahonesa y atún y tapamos.


De esta forma ya tendremos nuestro pincho terminado. Como has visto es muy fácil de preparar y cuando lo pruebes verás que gustará un montón y estoy segura de que triunfarás fijo.
¡Que disfrutes la receta!